
| TIENDA |
Joanna CABELLO
Lo que impacta la primera vez que descubrimos los animales de Joanna Hair es su presencia, la fugaz impresión de que están a punto de moverse. Para lograr esta ligereza, esta claridad, tuvo que digerir documentación ecléctica, dedicar tiempo a sus modelos, aprender a comprender sus movimientos e intentar comprender las curvas y tensiones. Luego viene el trabajo en el estudio: tomar un bloque de arcilla, dos o más, esbozar una forma, empezar cometiendo errores, retroceder, continuar, avanzar, perseverar hasta el momento en que, de repente, todo está casi en su lugar, intentando preservar ese instante de vida, continuar sin romper ese delicado hilo. A veces, el hechizo se rompe y la arcilla vuelve a su estado inerte: ¡una batalla más que un placer! Finalmente, la cocción. El paso final, la sorpresa definitiva, porque el fuego sigue siendo el rey. Se mete al horno. Poco más de una hora después, ya alcanza los 1000 °C. Las piezas se retiran una a una del horno, se entierran en serrín, humo acre, y luego se cuecen al vapor, sin dejar de calentar. La cocción "raku" implica contacto directo con fuego, calor, humo y vapor: otra batalla. Luego viene la limpieza y la sorpresa, a menudo agradable, a veces desagradable, de haber trabajado por tan poco. Es a este precio, gracias a esta experiencia, esta investigación, esta artesanía, que los animales de Joanna son naturalmente tan elegantes, tan extrañamente vivos.
| JOANNA PELO |














